Salvo contraindicaciones, el deporte “suave” y adaptado al embarazo es posible, incluso recomendado. Si estás embarazada, olvida la búsqueda del rendimiento y opta por un entrenamiento focalizado en el bienestar. Lo más importante durante el embarazo es escucharse.
Hacer ejercicio durante el embarazo: es posible pero ¡bajo ciertas condiciones!
El embarazo provoca ciertos trastornos a nivel físico, psicológico y hormonal, lo que quiere decir que sueles estar más cansada que lo habitual. Esto es normal puesto que tu organismo trabaja en el crecimiento de tu futuro bebé. El embarazo también puede ir acompañado de algunas molestias como las náuseas, la ciática, dolor de espalda, cansancio, etc. Sin embargo, el embarazo no es una enfermedad, pero requiere de ciertos cuidados que debes tener en cuenta para que el deporte sea más agradable.
Evita el deporte en caso de contraindicaciones
Si deseas continuar tus entrenamientos mientras estás en periodo de gestación, debes preguntar siempre por un certificado médico. Debido a que existen ciertas contraindicaciones como una fisura de la bolsa amniótica, un retraso del crecimiento intrauterino, enfermedades pulmonares o cardiovasculares, hasta pérdidas del líquido amniótico. En caso de un embarazo gemelar, de abortos espontáneos o de nacimientos prematuros, es indispensable hacer el doble de atención.
Los múltiples beneficios del ejercicio durante el embarazo
Aunque existan ciertas contraindicaciones, el deporte a inicios del embarazo tiene numerosos beneficios. Durante este periodo, los entrenamientos a intensidad razonable permiten:
- Mejorar la circulación de la sangre
- Limitar el riesgo de diabetes
- Proporcionar el bienestar general gracias a la secreción de endorfinas
- Apropiarse de este nuevo cuerpo y comprender las nuevas sensaciones vinculadas al bebé
¿Qué tipo de ejercicios realizar durante el embarazo?
Durante los 9 meses de embarazo, es posible continuar el deporte bajo supervisión médica. Es importante que escojas actividades adaptadas al embarazo, para garantizar tu salud y la del bebé. De tal forma, evita el deporte de alto riesgo como el combate, el ski, el patinaje o la equitación. Cabe resaltar que el buceo es prohibido desde el comienzo del embarazo, puesto que el buceo puede provocar abortos espontáneos.
En general, los deportes de alto impacto o aquellos “riesgosos” son a evitar.
El fitness y el gimnasio para una mujer embarazada
Existen diferentes tipos de ejercicios que una mujer embarazada puede realizar, como el yoga, la natación, el aquafitness o la caminata son deportes recomendados para las mujeres embarazadas. La sensación de estar en el agua es particularmente agradable puesto que el peso del bebé se vuelve más ligero.
Las actividades en el gimnasio para una mujer embarazada son de igual forma bienvenidas, puedes privilegiar el gym suave adaptando la intensidad de los esfuerzos y la duración de los entrenamientos.
Piensa en tu bienestar y ¡relájate!
El embarazo puede llegar a ser un periodo de estrés o de preocupaciones, es por esto que te aconsejamos realizar una clase de Yako Détente, esta clase de relajación, propuesta por los entrenadores del l’Orange Bleue, te permitirán encontrar la paz y aprender los diferentes tipos de respiraciones para poner en práctica el día del parto.